Remedios con serbal para limpiar la sangre, cistitis y más

El serbal es un árbol caducifollo, perteneciente a la familia de las Rosáceas, que recibe varios nombrescomo serbal de cazadores, acafresna, azarollera borde, pomal bordo y mostajo

Es oriundo de la mayor parte de Europa, excepto el extremo sur, y el norte de Asia.

Tiene una copa esbelta, airosas ramas que se alzan hacia el cielo, corteza lisa grisácea, flores blancas y un follaje que despliega tonos carmesí en otoño. El fruto globoso es tipo baya.

El cultivo del serbal presenta escasas exigencias, desarrollándose en tierra pobre, clima duro y peores condiciones invernales.

El serbal aparece en la mitología griega como creado a partir de las plumas y la sangre de un águila enviada por los dioses para ayudar a la recuperación del cáliz mágico de Hebe, que les proporcionaba el elixir de la juventud. En la mitología Irlandesa y escandinava, el serbal de cazadores fue el árbol del que se hizo a la primera mujer y también el que salvó ¡a vida del dios Thor

Conocido como «árbol de las hadas» por sus flores blancas, el mostajo está dedicado a la diosa Inglesa Brlgantla y a la celta Brigid o Brighld como diosas de la primavera.

Posee una antigua reputación como antídoto contra la brujería; sus bayas, en las que aparece una diminuta estrella de cinco puntas (pentáculo), y su vibrante color rojo son antiguos símbolos de protección. Solían llevarse trozos de árbol en los bolsillos y se cosían cruces de brazos iguales fabricadas con él en la ropa o se colgaban en los establos de las vacas como amuletos de protección.

La forma más popular de su conservación es secar las bayas. Estas son muy resistentes y en lugar seco no producen moho. Incluso en habitaciones húmedas sólo se enmohecen en circunstancias especialmente favorecedoras. Al sol se puede dejar secar más cantidad de bayas, con la ventaja de escasas pérdidas en sustancias activas.

Con las serbas pueden confeccionarse zumos, jarabe, puré, mermelada, jalea, compota y pasta. Tostadas constituyen un sustitutivo del café, mejor que el de achicoria.

Propiedades curativas

En las bayas del serbal encontramos el ácido sórbico, una sustancia tanínica, los ácidos málico, cítrico, y probablemente ácido tartárico. En las semillas existe algo de amigdalina y también en las hojas, los brotes, las ramas jóvenes y la corteza.

Mientras que en las serbas comunes amargas, por término medio, sólo existen de 40 a 50 mg de vitamina C en 100 g de sustancia fresca, en la serba dulce se encuentra de 75 a 100 mg en 100 g de sustancia fresca. Tampoco ha de despreciarse el considerable contenido en vitamina A.

El zumo de serbas, empleando los métodos sencillos de presión, da de 6í,8 a 72,3 mg por 100 de vitamina C y los frutos conservados secos contenían aún 36 mg por 100.

Las bayas del mostajo contienen un flavonolde denominado quercitina o meletina que se usa para tratar la fragilidad capilar anormal.

Es antioxidante, antiviral y se dice que alivia las alergias, la inflamación prostática, la cistitis, la arterieesclerosis y las cataratas

Remedios populares

Remedio con serbal para la diarrea Consumir diariamente, por la mañana, de 10-12 bayas hasta que la diarrea sea eliminada..

Remedio con serbal para limpiar la sangre Hervir 1 cucharada de las hojas de serbal en una taza de agua por 5 minutos. Dejar refrescar y colar. Tomar 1 taza al día.

Remedio con serbal para la amenorrea: Verter un puñado de flores secas de serbal en 1/2 litro de agua y hervir por 10 minutos. Colar y tomar a lo largo del día

Remedio antioxidante con serbal Colocar en una licuadora 3 fresas, 2 bayas de serbal y 3 moras junto con 1/2 vaso de agua. Licuar por unos instantes. Tomar este jugo a dario.

Remedio con serbal para la cistitis Colocar un puñado de arándanos agrios y 3 bayas de serbal en un licuadora y licuar por unos instantes. Tomar todos los días.

Remedio con serbal para la retención de líquidos Colocar un puñado de perejil y 3 bayas de serbal en la licuadora junto con 1 vaso de agua. Licuar, colar y tomar 1 o 2 vasos al día

Recomendaciones

Si los frutos se cosechan bastante tarde, después de haber pasado sobre ellos varias heladas, puede prepararse con su pulpa una mermelada en la que puede mezclarse pulpa de manzana, pera, membrillo, calabaza, zanahoria o escaramujo. Se pondrá azúcar en proporción de un tercio o un medio del peso. También pueden emplearse así los residuos de la obtención del zumo.

Cuando los frutos están algo amargos, lo que sucede especialmente en las bayas pequeñas, se deja la preparación 12 a 14 horas en agua, lavándose después.

Se puede obtener una sabrosa compota, siguiendo la siguiente receta: con 900 g de azúcar y un litro de agua se prepara una solución. En ella se introducen los frutos (privados ya de amargor si son pequeñas las bayas) y se pasteurizan.