Vitaminas para la gastritis

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La gastritis se define como una inflamación de la mucosa del estómago. Existen diferentes tipos de gastritis y que a continuación se describen:

Gastritis no erosiva por Helicobacter pylori Según la teoría actual, la principal causa de la gastritis verdadera es la infección por Helicobacter pylori, que se encuentra aproximadamente en el 90% de los pacientes con gastritis crónica.

Helicobacter pylori es una bacteria cuya capa externa es resistente a los efectos normales del ácido del estómago, que destruye el resto de bacterias.

Esta resistencia permite que la bacteria pueda permanecer en el estómago durante largos períodos de tiempo, incluso años, y eventualmente causa síntomas de gastritis o úlcera cuando aparecen otros factores, como la presencia de gérmenes específicos o el uso de medicamentos antiinflamatorios no esteroideos.

Los estudios sobre el papel de Helicobacter pylori en el desarrollo de gastritis y úlcera péptica han descartado la creencia anterior de que el estrés daba lugar a la mayoría de las úlceras de estómago y duodeno.

Los nuevos hallazgos han permitido un mejor tratamiento y una reducción de las úlceras de estómago. Helicobacter pylori se transmite fundamentalmente entre personas, aunque las vías específicas de transmisión todavía están siendo estudiadas. También están en marcha estudios para determinar el papel de esta bacteria, y de la gastritis crónica que produce, en el desarrollo del cáncer gástrico.

Gastritis erosiva y hemorrágica Después de Helicobacter pylori, la segunda causa más frecuente de gastritis es la utilización de medicamentos antiinflamatorios no esteroideos (AINE). Habitualmente se emplean como analgésicos, e incluyen el ácido acetilsalicílico, el fenoprofeno, el ibuprofeno y el naproxeno, que pueden producir gastritis y úlceras pépticas.

Otras formas de gastritis erosivas se deben al alcohol, a agentes corrosivos, o a lesiones de los tejidos del estómago a partir de la ingestión de cuerpos extraños.

Otras formas de gastritis Los clínicos no están de acuerdo en la clasificación de las formas menos comunes y específicas de gastritis, especialmente desde que ha aparecido Helicobacter pylori como fundamental en el desarrollo de la gastritis crónica y las complicaciones de la enfermedad.

Otros tipos de gastritis que se pueden diagnosticar son los siguientes:

• Gastritis aguda por estrés. Esta es la forma más grave. Suele presentarse en pacientes críticos, como los que se encuentran en una unidad de cuidados intensivos. Las erosiones por estrés pueden aparecer bruscamente como resultado de un traumatismo grave o agresiones sobre la cubierta interior del estómago.

• Gastritis atrófica. Esta forma de gastritis deriva de la gastritis crónica. Se caracteriza por atrofia o disminución en el tamaño de la capa que recubre el estómago. La gastritis atrófica es la etapa final de la gastritis crónica y puede ser un precursor del cáncer gástrico.

• Gastritis superficial. Este término suele emplearse para describir las fases leves de la gastritis crónica.

• Formas infrecuentes de gastritis son: granulomatosa, eosinofílica y linfocítica.

Afortunadamente, todos los tipos de gastritis reaccionan favorablemente a un cambio de dieta y a una mejor nutrición. En este sentido, los suplementos vitamínicos pueden ayudar. A continuación, se detallan aquellos suplementos y vitaminas necesarias para mejorar la gastritis:

Vitaminas y suplementos para la gastritis

De todos los tratamientos alternativos para la gastritis, los suplementos dietéticos de diferentes tipos son los que se han estudiado más en la investigación clínica. La medicina alternativa ha empleado los siguientes suplementos:

• Vitaminas. La investigación preliminar sugiere que grandes dosis de vitamina A pueden reducir o eliminar la gastritis erosiva. La vitamina B12 es útil para los pacientes con anemia perniciosa relacionada con la gastritis atrófica.

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• Capsaicina. Es el principio activo de los pimientos de los que se extrae el chile. Un estudio en humanos indica que la capsaicina ofrece alguna protección frente a la gastritis causada por ácido acetilsalicílico.

• Antioxidantes. La vitamina C y los betacarotenos en combinación parecen ser beneficiosos para la mayoría de los pacientes con gastritis crónica atrófica.

• Aminoácidos. Varios estudios indican que la cisterna acelera la curación de la gastritis sangrante relacionada con AINE y de la gastritis atrófica. La glutamina parece proteger contra el desarrollo de gastritis relacionada con el estrés.