Remedios con cinoglosa para nerviosismo y más

La cinoglosa recibe varios nombres como lengua de perro, lengua de can, besneula, maneula, viniebla, bizniega, oreja de liebre.

Esta planta pertenece a la familia de las Boraginaceae y crece en baldíos secos, céspedes abandonados y matorrales en regiones templadas de Europa, Siberia y América del Norte.

La cinoglosa es una planta herbácea bienal, que mide de 30 a 80 cm de altura Su tallo es muy velloso, erecto, anguloso y está ramificado. Los densos tallos laterales, que luego aumentan de longitud, parten de las axilas de las hojas.

Las hojas inferiores tienen pecíolos largos y son lanceoladas; las hojas superiores son sésiles, semiamplexicaules, alargadas y lanceoladas. Son vellosas o pubescentes por las dos caras y ásperas al tacto.

Las densas inflorescencias se alargan cuando envejecen. Las flores individuales son pedunculadas y colgantes. Las piezas del cáliz son ovadas; las de la corola, de color pardo rojizo o, a veces, rosa, miden unos 6 mm. Las cuatro máculas son ovoides y están cubiertas de espinas ganchudas.

El fruto es un tetraquenio y las semillas tienen pequeños garfios y son rugosas al tacto.

Se encuentra esta especie en la mayor parte de Europa, con excepción de los extremos norte y sur.

En Europa central crecen otras especies de Cinoglosa: C. columnae, anual, originaria de la cuenca mediterránea, con flores de color azul oscuro, y C. germanicum, con corola violácea. Crecen sólo en suelos calizos, desde el centro de Inglaterra hasta Italia, en Bulgaria y en Ucrania.

Propiedades curativas

La cinoglosa contiene alcaloides, como cinoglosina, cinoglosenina y consolidina, algunos de los cuales son de tipo pirrolizidínico, con toxicidad hepática; también posee alcaloides-esteres (heliosupina), mucílago (fructosanos), diureidos glicoxílicos (alantoína), taninos, principios amargos y colina.

Se utilizan la raíz, las hojas y la planta entera.

Es astringente, demulcente, cicatrizante, emoliente y tónico venoso. Se recomienda en el tratamiento del catarro, la tos y la diarrea. Tanto por vía interna como por vía externa, se usa en las hemorroides.

Por vía externa y en forma de cataplasma, se emplea en quemaduras leves, várices, úlceras tórpidas, contusiones e inflamaciones.

Remedios populares

Remedio con cinoglosa para las quemaduras leves: Hervir 2 puñados de hojas de cinoglosa en un litro de agua por 15 minutos. Pasado ese tiempo, retirar del fuego y dejar refrescar. Colar y empapar un paño limpio con esta preparación. Aplicar, a modo de fomentos frío, sobre la zona quemada.

Remedio con cinoglosa para las metrorragias y otros tipos de hemorragias Reducir a polvo 1 gr de raíz de cinoglosa y tomar mezclado con un poco de agua y miel.

Remedio con cinoglosa para el nerviosismo: Verter 15 gramos de corteza de raíz de cinoglosa previamente picado en 1/4 de litro de agua y hervir por 10 minutos. Tapar y dejar refrescar. Tomar, poco a poco, mezclado con unas gota de miel a lo largo del día.

Remedio con cinoglosa para los espasmos estomacales Hervir 1 cucharadita de hojas de cinoglosa picadas en una taza de vino. Tomar 1 taza una vez esté refresco.

Remedio con cinoglosa para la piel seca de las piernas Machacar un puñado de hojas de cinoglosa y mezclar en 1 cucharadita de manteca de cerdo. Aplicar sobre la piel seca varias veces al día.