Minerales para controlar la diabetes

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Si hay algo bueno que se pueda decir de la diabetes tipo 2 (no insulino dependiente), la cual afecta 1.3 millones de hispanos en los Estados Unidos, es que este trastorno generalmente responde muy bien a los cambios de alimentación y de estilo de vida.

En este sentido, la pérdida de peso pueden tener un impacto positivo en esta enfermedad. Por ejemplo, si pierde tan sólo 10 libras (5 kg), podrá reducir su resistencia a la insulina.

Esto le ayudaría mucho porque la insulina conduce el azúcar en la sangre (la glucosa) a las células. A fin de que sus células obtengan la energía vital necesaria, deben aceptar y no resistirse a la insulina.

Igualmente, la alimentación rica en ciertos minerales pueden ayudar a controla la diabetes. A continuación, se detallan:

El mineral cromo ayuda a que la insulina funcione mejor

Los estudios de personas diabéticas han demostrado que complementar la alimentación con un mineral llamado cromo puede reducir los niveles de azúcar en la sangre en ayunas, mejorar la tolerancia a la glucosa y reducir los niveles de insulina.

El cromo ayuda a que la insulina trabaje mejor y a que se una a los receptores celulares de manera que las células puedan absorber la glucosa. Muchas personas con diabetes tipo 2 tienen suficiente insulina, pero ésta no funciona bien. Sus células se resisten a la insulina. El cromo ayuda a superar esta condición.

Un estudio grande claramente documentó el beneficio del cromo para las personas con diabetes tipo 2. En el estudio, se dividió a un total de 180 personas en tres grupos. El primer grupo recibió pildoras inactivas (placebos), el segundo grupo recibió 100 microgramos de picolinato de cromo {chromium pícolínate) dos veces al día y el tercer grupo recibió 500 microgramos de picolinato de cromo dos veces al día. Todos los participantes continuaron tomando sus medicamentos normales.

En los dos grupos que tomaron cromo hubo una reducción significativa en la hemoglobina glucosilada, la cual es una medida del control de la azúcar en la sangre a largo plazo. Hubo también una reducción significativa en los niveles de insulina en ayunas y los niveles de insulina analizados dos horas después de tomar alimentos. Los niveles de colesterol en la sangre también fueron menores en las personas que consumieron cromo.

Se recomienda a todos sus pacientes diabéticos que consuman cromo. La forma del cromo que recomienda —la que se absorbe con mayor facilidad— es el picolinato de cromo. Para los pacientes que lo necesitan y que están bajo supervisión médica, la dosis inicial puede ser un máximo de 1,000 microgramos al día de este suplemento.

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Si usted está tomando cromo por cuenta propia, se aconseja que consuma sólo de 200 a 400 microgramos. Debido a que el cromo hace que la insulina en su cuerpo trabaje mejor, usted debe ser cuidadoso cuando lo tome. Puede provocar un bajo nivel de azúcar en la sangre hasta que se le estabilice la insulina, de manera que su médico debe monitorear sus niveles de azúcar en la sangre durante todo el tiempo que usted lo tome.

Aparentemente, la cantidad y la forma del cromo son importantes. En la mayoría de los estudios en los que se comprobó que el cromo era benéfico, las personas tomaban el tipo picolinato de cromo, en dosis de por lo menos 200 microgramos al día. Debido a que la mayoría de los multivitamínicos/suplementos minerales contienen cloruro de cromo (chromium Mondé), una forma menos fácil de absorber, usted probablemente no podrá depender de un multivitamínico estándar para que le ayude a obtener la dosis que necesita.

El mineral vanadio incrementa la acción de la insulina

Según varios estudios, otro mineral llamado vanadio aparentemente mejora la acción de la insulina en las personas que padecen de diabetes. En un estudio, las personas con diabetes tipo 2 que tomaron 50 miligramos de vanadio dos veces al día durante cuatro semanas presentaron una reducción del 20 por ciento en los niveles de azúcar en la sangre en ayunas. La forma que tomaron fue sulfato de vanadilo (vanadyl sulfate).

El vanadio también tiene un efecto similar al de la insulina y reduce los niveles de azúcar en la sangre. Si las personas toman un suplemento de vanadio, es probable que necesiten menos cromo.

Se aconseja empezar con cinco microgramos de sulfato de vanadilo tres veces al día con los alimentos y después reduciría la dosis a cinco microgramos una vez al día, conforme los niveles de azúcar en la sangre cambiaran a un margen normal. Sin embargo, es necesario que un médico regule la dosis, de manera que no es recomendable tomar vanadio sin supervisión médica.

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Este mineral no le beneficia a todo el mundo. Algunos individuos afirman que se sienten más lúcidos, su nivel de azúcar en la sangre se estabiliza y se sienten estupendos. Sin embargo, otros sienten exactamente lo opuesto: aturdimiento, confusión y debilidad. Si usted presenta estas reacciones, debe dejar de tomar el vanadio. La seguridad de su uso a largo plazo no se ha demostrado y los resultados de algunos estudios hechos en animales sugieren cierta preocupación por la toxicidad en este sentido.

También existe la posibilidad de tener trastornos estomacales. En un estudio, seis de ocho individuos informaron que tuvieron diarrea, cólicos (retortijones) abdominales, gases y náusea durante la primera semana que tomaron vanadio. No obstante, después de eso, sus síntomas desaparecieron.