Cómo hacer pomadas para el dolor articular con guindilla

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La guindilla o chile es una especia picante muy utilizada en el mundo gastrómico, pero también en la medicina natural, ya que ayuda a prevenir y aliviar diferentes dolencias que incluyen formación de coágulos, arritmias, cáncer, diabetes II, entre otros.

Sin embargo, uno de los usos más importantes es como analgésico probado contra los dolores de artrítis y en las articulaciones.

Se ha demostrado que las cremas de capsaicina, principal compuesto de la guindilla o chile, pueden ejercer un efecto espectacular y duradero en diversas enfermedades dolorosas.

La mayoría de los estudios muestran que la capsaicina consigue aliviar el dolor de casi un 75 por ciento de los usuarios. Incluso funciona en casos de dolor extremos. Existe, por ejemplo, una crema de capsaicina destinada a los episodios más dolorosos, como el dolor asociado a la mastectomía o el postoperatorio de las amputaciones.

Es importante observar que este tipo de crema y pomadas han sido aprobada recientemente por la Administración de Medicamentos y Alimentos (FDA, sus siglas en inglés)

El inconveniente de la pomada de guindilla o chile es que el calor inicial puede causar enrojecimiento e irritación en algunas personas. No obstante, un estudio publicado en la revista Archives of Infernal Medicine informaba de que la crema de capsaicina había sido elegida el tratamiento preferido entre cien personas mayores aquejadas de dolor articular grave en las rodillas.

Las pomadas de guindilla o chile son especialmente beneficiosas para las siguientes dolencias:

Artritis. La capsaicina no solo mitiga el dolor relacionado con la osteoartritis, también se ha demostrado que incrementa los niveles del fluido sinovial, que lubrica las articulaciones y ayuda a prevenir la ruptura del cartílago; como resultado, se siente menos dolor y aumenta la flexibilidad.

En un estudio llevado a cabo por unos investigadores de la Facultad de Medicina de la Universidad de Miami, una parte de los participantes se aplicaron una solución de capsaicina al 0,025 % en la rodilla, cuatro veces al día, y la otra parte, una crema placebo. Al cabo de tres meses, el 81 por ciento de los integrantes del grupo tratado con capsaicina confirmó una reducción de los síntomas, incluyendo la rigidez matutina. Por el contrario, solo un 54 por ciento del grupo placebo afirmó sentirse mejor. El estudio fue publicado en la revista Seminars in Arthritis and Rheumatism.

Neuropatía diabética. En un estudio, los investigadores asignaron al azar una crema de capsaicina, o bien un placebo, a 250 pacientes afectados por una dolorosa neuropatía, una complicación común de la diabetes que suele dañar los nervios de las piernas y los pies. Pues bien, los pacientes que usaron la crema experimentaron una reducción de los síntomas de casi un 70 por ciento.

Descubre analgésicos naturales y caseros que puedes elaborar en casa

Con la excepción de la sensación de ardor inicial, la capsaicina presenta diversas ventajas frente a los analgésicos orales [calfhantes para el dolor]», escribieron los científicos en la revista Archives of Internal Medicine. Las ventajas incluían una mayor seguridad, menos efectos secundarios y menos interacciones medicamentosas.

Si usted quiere hacer su propia pomada de guindilla para combatir el dolor articular o la artritis que sufre, le presentamos 3 recetas que puede elaborar en casa

Recetas de pomadas para el dolor articular con guindilla

Receta de pomadas para el dolor articular con guindilla #1
Ingredientes
-3 Cucharadas de polvo de chile o guindilla
-1 Taza de aceite de almendras
-1/2 Taza de cera de abejas rallado

Preparación
Poner a baño Maria la cera de abeja y después de 5 minutos verter el polvo de chile o guindilla y seguir removiendo hasta que se haya derretido por completo. Enfriar la mezcla durante 10 minutos, y luego colocar en un frasco de vidrio con una tapa hermética y almacenar en el refrigerador. Esta pomada se conservará 2 semanas. Apliar sobre la zona afectada a diario.

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Receta de pomadas para el dolor articular con guindilla #2
Ingredientes
-3 Tazas de aceite de semilla de uva
-3 Cucharadas de guindilla o chile en polvo
-1/2 Taza de cera de abejas
-3 Cucharadas de cúrcuma en polvo
-2 Cucharadas de jengibre molido

Preparación

Mezclar los polvos de guindilla, cúrcuma, y jengibre. Verter, luego, 3 tazas de aceite de uva en un baño maría y agitar hasta que se mezcle bien.

Calentar durante 5-10 minutos a fuego medio y después adicionar la cera de abejas. Remover hasta que ésta se haya derretido por completo y todo se mezclan juntos, y luego retirar del fuego y enfriar por 10 minutos.

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Poner en un frasco de vidrio con una tapa hermética en el refrigerador, donde se mantendrá durante 2 semanas. Aplicar y luego frotar el área afectada y dejar que se seque antes de enjuagar.

Es importante observar que al frotar la zona dolorida con la pomada de guindilla o chile se siente una sensación de calor y ardor. Sin embargo, con el uso regular, por lo general, después de tres días, la capsaicina reduce y bloquea la transmisión del impulso doloroso, anestesia la zona e impulsa la segregación de somatostatina, que favorece el proceso curativo.