Remedios para la falta de vitamina E
Nos han preguntado sobre cuáles son las señales de la falta de vitamina E en el organismo y cuáles remedios existen al respecto.
Para dar una respuesta, es necesario observar varios aspectos que, a continuación, explicaremos.
La vitamina E es liposoluble, por lo que necesita la presencia de grasa para su absorción adecuada.
La vitamina E se absorbe a través del sistema gastrointestinal y se almacena en tejidos y órganos de todo el cuerpo.
Algunas enfermedades causan pérdida de vitamina E, como la enfermedad hepática, la enfermedad celíaca y la fibrosis quística. Los pacientes con insuficiencia renal que se someten a diálisis crónica pueden tener un riesgo de deficiencia de vitamina E. Estos pacientes reciben con frecuencia infusiones intravenosas de suplementos de hierro que pueden actuar contra la vitamina E.
La deficiencia de vitamina E produce fatiga, problemas de concentración, debilidad del sistema inmunitario, anemia e hipotiroidismo, así como problemas de visión e irritabilidad. Las cifras de vitamina E bajas se han asociado a depresión.
Propiedades curativas
La vitamina E es necesaria para el funcionamiento óptimo del sistema inmunitario, el mantenimiento de la salud ocular y la protección celular de todo el cuerpo. También se ha asociado a la prevención de diversas enfermedades. Los beneficios terapéuticos de la vitamina E son:
Prevención del cáncer. La vitamina E es un conocido antioxidante y se ha asociado a la reducción del riesgo de cáncer de colon, mama, cervical, de próstata y de pulmón.
Protección del sistema inmunitario. Diversos estudios han confirmado que, tras la suplementa-ción con vitamina E, especialmente en pacientes ancianos, se refuerza la función del sistema inmunitario. La vitamina E también ha detenido la progresión de la enfermedad de los pacientes VIH positivos.
Prevención de enfermedades oculares. Los estudios clínicos sobre la vitamina E han demostrado que la suplementación reduce de forma significativa el riesgo de cataratas y degeneración macular, especialmente entre las mujeres.
Prevención de la pérdida de memoria. La deficiencia de vitamina E se ha asociado a un mal rendimiento en las pruebas de memoria en algunos pacientes ancianos.
Tratamiento de la enfermedad de Alzheimer. En un estudio reciente, los pacientes que tomaron suplementos diarios de vitamina E mantuvieron una vida normal durante más tiempo.
Tratamiento de la diabetes. La vitamina E ayuda a los pacientes diabéticos a procesar la insulina de una manera más efectiva.
Alivio del dolor. La vitamina E actúa como antiinflamatorio y analgésico. Algunos estudios indican que es útil para el tratamiento del dolor de la artritis en algunas personas.
Prevención de la enfermedad de Parkinson. El consumo de dosis elevadas de vitamina E se asocian a un menor riesgo de desarrollar la enfermedad de Parkinson.
Tratamiento de la discinesia tardía. Las personas que reciben fármacos neurolépticos para la esquizofrenia u otros trastornos pueden presentar un efecto secundario conocido como discinesia tardía, en el que experimentan contracciones musculares involuntarias o temblores. La suple-mentación con vitamina E disminuye o elimina este efecto secundario en algunas personas.
Otros beneficios de la vitamina E son menos claros y polémicos, porque los resultados de los estudios son contradictorios o porque faltan estudios controlados que los confirmen. Destacan la prevención de la enfermedad coronaria, el aumento de la tolerancia a los rayos ultravioleta, el tratamiento de los sofocos, el mantenimiento y la reparación muscular y la fertilidad.
Remedios populares
Remedio para la falta de vitamina E #1: Consumir 1/2 cucharada de aceite de germen de trigo al día.
Remedio para la falta de vitamina E #1 Ingerir 1/2 taza de cereal de germen de trigo al día.
Remedio para la falta de vitamina E #2 Consumir 2 puñados de cacahuetes al día.
Remedio para la falta de vitamina E #3 Ingerir 3,19 mg de taza de habas de soja a dario.
Remedio para la falta de vitamina E #4 Consumir 1/2 cucharada de aceite de maíz con las comidas al día.
Remedio para la falta de vitamina E #5 Ingerir aguacate (2,69 mg por unidad) y aceite de oliva (1,68 mg por cucharada).
Recomendaciones
Igualmente, resulta beneficioso consumir uvas, melocotones, bróculi, coles de Bruselas, huevos, tomates y moras son buenas fuentes de vitamina E.
Los alimentos frescos y crudos contienen las cifras más elevadas de la vitamina. Tanto el calor como la luz reducen la potencia de las vitaminas y los minerales presentes en los alimentos frescos, por lo que cocerlos en exceso o guardarlos inadecuadamente no es aconsejable.
Los alimentos cortados o triturados tienen más superficie expuesta a la luz, por lo que las verduras y las frutas deben guardarse enteras para conservar toda su potencia vitamínica.
Precauciones
La sobredosis de vitamina E (por encima de 536 mg) producen náuseas, diarrea, dolor de cabeza, dolor abdominal, sangrado y presión sanguínea elevada.
Los pacientes con enfermedad cardíaca reumática, anemia por deficiencia de hierro, hipertensión o disfunción tiroidea deben consultar con su médico antes de tomar un suplemento de vitamina E, ya que ésta puede tener un impacto negativo sobre estas enfermedades.
La vitamina E se tolera bien, y sus efectos secundarios son raros. Sin embargo, en algunas personas con déficit de vitamina K, la vitamina E aumenta el riesgo de hemorragia. En algunos casos, los efectos secundarios se pueden disminuir o eliminar ajustando las dosis de vitamina E y vitamina K.
Los ungüentos, aceites o cremas de vitamina E desencadenan a veces una reacción alérgica conocida como dermatitis de contacto.
Las personas que deben aplicarse tópicamente preparaciones con vitamina E por primera vez o que cambian el tipo de producto con vitamina E que utilizan deben someterse a una prueba cutánea para comprobar la sensibilidad de la piel a la sustancia.
Las personas que están tomando anticoagulantes o medicamentos anticonvulsionantes han de consultar con su médico antes de recibir suplementos de vitamina E, ya que pueden alterar la eficacia de estos fármacos.
Los suplementos de hierro inorgánico destruyen la vitamina E, por lo tanto, las personas que toman suplementos de hierro deben espaciar las dosis (por ejemplo, el hierro por la mañana y la vitamina E por la noche).
Las dosis elevadas de vitamina A disminuyen la absorción de vitamina E, por lo que son necesarios ajustes de las dosis en las personas que toman suplementos de ambas vitaminas.
El alcohol y el aceite mineral también pueden reducir la absorción de vitamina E, y estas sustancias deben prohibirse a las personas con deficiencia de vitamina E.
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