Remedios para la elefantiasis

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La elefantiasis es un engrasamiento de un miembro o de una zona del cuerpo debida a la obstrucción de los vasos linfáticos, la cual produce una acumulación de linfa en la zona afectada.

En las regiones tropicales de Asia, África y América del Sur, la elefantiasis es debida a la presencia en los vasos linfáticos de unos gusanos, especialmente la filaría Wucherería brancrofti, cuyas larvas penetran en la corriente sanguínea por medio de la picadura de mosquitos de diversas especies.

Otras elefantiasis son debidas a infecciones repetidas principalmente de erisipela, a tumores que comprimen los vasos linfáticos y a dosis inadecuadas de radioterapia.

Entre sus síntomas, podemos indicar que los miembros inferiores, los más frecuentemente afectados, presentan un engrasamiento de altura variable que les da aspecto de «bota de montar»; la piel adquiere una consistencia dura y fibrosa, con lo que recuerda a la del elefante.

Cuando se localiza en los genitales, especialmente en los masculinos, aparecen dificultades para orinar y el escroto se deforma hasta tamaños monstruosos. Las mamas también pueden sufrir alteraciones de volumen.

En la cara, sobre todo en los casos de brotes repetidos de erisipela, se forman grandes bolsas en los párpados inferiores, mientras que la nariz, las orejas y los labios pueden, estar muy abultados. Frecuentemente se observan várices linfáticas en las zonas afectadas. El dolor varía según los casos.

El diagnóstico se hace mediante un análisis de sangre para determinar la presencia en ella de la larva de la filaría. Es importante conocer si el enfermo tiene en su historial médico antecedentes de erisipela o de tratamientos con radiaciones.

Remedios populares

Remedio para la elefantiasis #1: Verter 4 o 5 clavos de olor molidos en 1 taza de agua que esté hirviendo. Tapar y dejar refrescar. Tomar, sin colar, 2 veces al día. Las enzimas del clavo de olor ayudan a matar a todos los tipos de parásitos inmaduros.

Remedio para la elefantiasis #2: Añadir tres gotas de aceite de nuez negra en una taza de agua tibia y beber esta solución dos veces al día. Haga esto durante al menos seis semanas

Remedio para la elefantiasis #3: Hervir, por 10 minutos, un puñado de raíz de jengibre seco, previamente lavado y picado, en 1/2 litro de agua. Retirar del fuego pasado ese tiempo, dejar refrescar y colar. Tomar a lo largo del día.

Remedio para la elefantiasis #4: Aplicar la pasta de las hojas de la planta Brahmi (su nombre hindú) o hisopo e agua en las zonas afectadas y dejar puesta por 30 minutos. Pasado ese tiempo, retirar con agua tibia. Realizar este remedio 2 veces al dia

Remedio para la elefantiasis #5: Mezclar aceite de sésamo y aceite de ricino en la proporción 1: 2 y aplicar, mediante un suave masaje, sobre las partes afectadas. Realizar este remedio a diario.

Remedio para la elefantiasis #6: Mezclar, a partes iguales, flor de caléndula, hojas de amor de hortelano y raíces de equinácea y luego extraer 1 cucharada. Verter en una taza de agua que esté hirviendo. Tapar y dejar refrescar. Colar y tomar dos veces al día. Este remedio refuerza el sistema inmunológico con el fin de erradicar la enfermedad, pero sólo se debe tomar por un mes.

Remedio para la elefantiasis #7: Aplicar aceite de semilla de mostaza sobre la zona afectada varias veces al día.

Recomendaciones

Usar medias elásticas, ya que favorecen la circulación de la linfa.

Preguntas y respuestas

¿Cuánto tiempo suele mediar entre la picadura del mosquito que introduce en la sangre la larva de la filaria y la aparición de los primeros síntomas de la enfermedad?
Las grandes hinchazones no se observan hasta pasados varíos meses, incluso más de un año, pero antes se presentan otros síntomas menores, como urticaria, fiebre, dolor, hinchazón difusa en las piernas, los brazos y el escroto, e inflamación de los ganglios linfáticos. Más tardíamente pueden aparecer artritis, diarrea y varices linfáticas.

El tratamiento médico suele curar la enfermedad si se aplica cuando todavía no ha aparecido la elefantíasis propiamente dicha, con sus engrasamientos, porque en esta última fase los vasos linfáticos y los tejidos cercanos se dañan irreversiblemente.

¿Cómo entran en los mosquitos las larvas de los gusanos causantes de elefantiasis?
El ciclo comienza cuando un mosquito sano pica a una persona infectada con filarías y se hace con ello portador de las larvas microscópicas de este gusano.

Las larvas necesitan permanecer un tiempo en el tubo digestivo del insecto para alcanzar la siguiente fase de su evolución y, posteriormente, cuando el mosquito pica a otra persona, son inoculadas ya maduras en la sangre, donde crecen. Al cabo de un tiempo se convierten en gusanos adultos que emigran a los vasos linfáticos, obstruyéndolos. El tamaño de los gusanos puede alcanzar los 10 cm en el caso de las hembras.

¿Tiene algo que ver un edema en la pierna con la elefantiasis?
No. La hinchazón de las piernas a causa de un edema es una acumulación de líquido en los tejidos orgánicos debida al aumento de la presión de las venas que deriva de un mal funcionamiento del corazón, o al descenso de las proteínas del plasma que acompaña algunas enfermedades hepáticas y renales. Ambos trastornos provocan el paso de líquido de los vasos sanguíneos a los tejidos adyacentes, lo que da lugar a la hinchazón, pero no hay obstrucción de los vasos linfáticos.

¿Es cierto que la erisipela puede propiciar una elefantiasis?
Así es, aunque ocurre con escasa frecuencia. Existe una forma de erisipela facial que se presenta repentinamente, sobre todo en el sexo femenino, y produce una hinchazón de la zona con deterioro de sus vasos linfáticos. La red linfática no consigue recuperar entonces su estado normal entre infección e infección, y acaba por aparecer un estado elefantiásico en ocasiones irreversible. No obstante, el tratamiento correcto de la erisipela puede impedir estas complicaciones.

¿Existe alguna vacuna contra la elefantiasis?
Desgraciadamente no existe inmunidad alguna contra esta enfermedad. Sin embargo, no se debe temer en exceso el contagio -ni siquiera en los países donde la enfermedad está más extendida-siempre que se adopten algunas medidas preventivas elementales, como hospedarse en lugares con un buen nivel de higiene y usar mosquitera y productos repelentes contra los insectos. Sólo una mínima parte de mosquitos son portadores de larvas de filarla, e incluso en el caso de que los infectados piquen a una persona sana, es muy difícil que la enfermedad prospere.

El daño en los vasos linfáticos que da lugar a la elefantiasis…
Sólo puede producirse en caso de accidente o error en la aplicación de la radioterapia, o bien sí las lesiones hacen necesario el uso reiterado de ella. En los tratamientos normales, las zonas irradiadas suelen ser pequeñas y superficiales, y las radiaciones muy débiles, por lo que casi no existe el peligro de secuelas tan graves como la elefantiasis