Cáscara de la uva: Propiedades, beneficios y contraindicaciones

Las uvas son una de las frutas más consumidas alrededor del mundo y se cultivan desde épocas remotas.

Es importante observar que nada se desperdicia de la uva, ya que tanto sus tallos como las semillas y su cáscara son empleados para diferentes remedios caseros y naturales e incluso con ellas se elaboran suplementos alimenticios.

Hoy veremos cómo la cáscara de la uva nos ayuda a conservar o mejorar nuestra salud.

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Propiedades curativas

La cáscara de la uva (Vitis vinijera) es la capa externa y puede ser de color verde, rojo o negro púrpura.

En la cáscara de las uvas, se localiza una gran cantidad de bioflavonoides (quercetina, catequinas, flavonoides y antocianidinas) y de polifenoles no bioflavonoides (derivados ácidos). Un importante componente no bioflavonoide presente en la cáscara de la uva es el resveratrol.

Se trata de una enzima específica de las plantas presente en 72 especies distintas, como uvas, cacahuetes y piñas. Las uvas son la fuente más importante de esta enzima. La presencia de resveratrol en la planta está inducida por el estrés, la lesión, la infección o las radiaciones ultravioleta.

Se cree que la «lesión» de la cáscara de la uva, producida durante la fabricación del vino, aumenta de forma significativa la proporción de resveratrol. Las cantidades relativamente elevadas de la enzima en la cáscara de la uva ayudan a la planta a resistir las infecciones micótícas, diversas enfermedades, el tiempo adverso y los ataques de insectos y animales.

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Existen muchos usos terapéuticos del resveratrol presente en la piel de las uvas negras. En estudios clínicos, la enzima ha demostrado unos efectos antiinflamatorios equivalentes o mejores en comparación con medicamentos antiinflamatorios bien establecidos, como la fenilbutazona y la indometacina. En animales, inhibe las fases aguda y crónica de la inflamación.

En seres humanos, algunos investigadores han observado que el resveratrol es un anticoagulante más efectivo que el ácido acetilsalicílico, que se utiliza con frecuencia para disminuir el riesgo de infartos.

De hecho, esto explica la «paradoja francesa» que se refiere al hecho de que los franceses consumen una dieta rica en grasas y tienen muchos menos ataques cardíacos que los americanos.

Además, los franceses presentan un colesterol en la sangre y una presión sanguínea similares a los de los americanos. Los investigadores han descubierto que el principal motivo de este fenómeno es la presencia de pro-antocianidinas oligoméricas en la cáscara de la uva, y no en el alcohol que contiene, del vino tinto que beben los franceses.

Estudios preliminares en animales también indican que el resveratrol puede interferir en el desarrollo del cáncer de tres formas: bloqueando la acción de los agentes que causan el cáncer, inhibiendo el crecimiento de los tumores y haciendo que las células precancerosas vuelvan a la normalidad.

Aunque los investigadores no están seguros sobre cómo produce el resveratrol efectos beneficiosos en los seres humanos, la suplementación con extracto de cáscara de uva negra o el consumo de uno o dos vasos de vino tinto al día evita o alivia los siguientes trastornos:
• Envejecimiento.
• Hematomas (fragilidad capilar).
• Cáncer.
• Infección micótica.
• Diabetes.
• Enfermedad coronaria (endurecimiento de las arterias y colesterol elevado).
• Inflamación (incluyendo bursitis y tendinitis).
• Síndrome de Raynaud (trastorno de los vasos sanguíneos).
• Venas varicosas.
• Problemas de visión (cataratas y glaucoma).
• Curación de las heridas.

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Preparaciones

El extracto de cáscara de uva negra se prepara en cápsulas. Para el mantenimiento de los adultos, el nivel terapéutico oscila entre 200 y 600 mg de antocianinas al 30%, aunque no hay recomendaciones definitivas.

El resveratrol de la cáscara de la uva negra y su extracto también se encuentran en el vino tinto y el zumo de uva.

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Sin embargo, este último es menos beneficioso que el vino tinto debido a la técnica de procesamiento de las uvas. Por ejemplo, el zumo de uva sólo tiene una tercera parte de las propiedades anticoagulantes del vino tinto.

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Precauciones

Aunque la investigación es limitada, los científicos no recomiendan ninguna precaución respecto al uso de la cáscara de uva o de su extracto. Sin embargo, hay que ser consciente de los efectos secundarios conocidos del vino tinto y el resveratrol.

Existen muchos posibles efectos secundarios del consumo de cantidades excesivas de vino tinto (reacciones alérgicas a los sulfitos, intoxicación y lesión hepática). Con el fin de obtener los beneficios del resveratrol para su salud, cada persona debe valorar los riesgos y los beneficios de consumir alcohol.

Sin embargo, el propio resveratrol es también un fitoestrógeno (estrógeno vegetal), por lo que puede desempeñar un papel en los efectos cardiovasculares beneficiosos del vino tinto (por ejemplo, un aumento del colesterol de alta densidad [HDL] o «colesterol bueno»).

Por otro lado, se ha apreciado que el consumo de vino tinto favorece la proliferación de algunas células del cáncer de mama que requieren estrógenos para crecer. De esta forma, el resveratrol puede tener efectos secundarios en algunas personas, especialmente aquéllas con una historia de cáncer de mama o las mujeres posmenopáusicas que toman terapia hormonal sustitutiva.

Las investigaciones acerca de las interacciones de la piel de uva o de su extracto con fármacos, alimentos o enfermedades son muy limitadas y no concluyentes.

Sin embargo, el resveratrol de la cáscara de uva consumido en forma de vino tinto puede interaccionar adversamente con fármacos y alimentos. Es recomendable consultar con el médico antes de beber alcohol con algún tipo de fármaco prescrito o preparado que se dispense sin receta. Conoce contraindicaciones y efectos secundarios de las uvas

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