Remedios con vellosilla para adelgazar, edemas y más
La vellosilla, llamada también pelusilla y oreja de ratones, es una hierba vivaz, perteneciente a la familia de las compuestas, que puede llegar a alcanzar hasta medio metro de altura.
Produce una roseta de hojas lanceoladas, cubiertas de abundante vello, de un verde pálido por la haz y blancas por el envés. Del centro de dicha roseta arrancan uno o más bohordos cortos que llevan en su ápice un capítulo de color amarillo.
Los frutitos son muy pequeños, a lo sumo de poco más de 2 mm. Esta planta rezuma por sus heridas un látex blanco.
Florece durante la primavera y verano, a partir del mes de abril en los tempranales. La vellosilla es indicadora de magrez y de cierto grado de sequedad en el suelo.
Es importante observar que la vellosilla debe usarse fresca, ya que seca pierde casi toda su actividad y sus propiedades.
Propiedades curativas
La más importante de las facultades de esta planta, aparte sus antibióticos, se refiere a su poder astringente.
En la Europa Central la vellosilla es usada como remedio frecuente, incluso sus raíces y sus cabezuelas, para combatir los catarros bronquiales, la diarrea, las lombrices intestinales, etc., así como para regularizar los menstruos, sobre todo cuando son excesivos. Igualmente, se emplea para combatir la disentería.
La vellosilla tiene notables facultades diuréticas de forma tal que la cantidad de orina puede doblarse con su uso e incrementa también los cloruros y urea eliminado. No influye en ello el agua absorbida por el paciente con el cocimiento o la infusión, porque pequeñas cantidades de su extracto fluido provocan los mismos resultados.
Por consiguiente, es planta que se suele dar para combatir la retención de líquidos como en los casos de hidropesía, nefritis, ascitis, edemas, etc., y en general siempre que convenga desembarazar el organismo de productos de desecho sin irritar el epitelio renal.
Los principios antibacterianos contenidos en esta especie se utilizan contra la fiebre. La substancia antibiótica, de gran poder difusivo pasa rápidamente al suero y a la orina, donde actúa con gran eficacia, sobre todo cuando se trata de fiebres con temperaturas más o menos elevadas.
Remedios populares
Remedio con vellosilla para las edemas Verter 1 cucharadita de planta fresca desmenuzada de vellosilla en una taza de agua que esté hirviendo. Dejar reposar por 15 minutos y filtrar. Beber 3 tazas al día. agregando una rodaja o un chorro de limón, con posterioridad a las comidas.
Remedio con vellosilla para la retención de líquido Hervir 400 ml de agua y cuando llegue a la ebullición, verter 12 g de hojas de vellosilla. Retirar del fuego, cubrir y dejar refrescar. Tomar a lo largo del día.
Remedio con vellosilla para adelgazar Hervir media alcachofa pequeña por 10 minutos en un litro de agua. Separado verter 1 cucharada de vellosilla en una taza de agua que esté hirviendo. Tapar y dejar refrescar. Colar y añadir al agua de la alcachofa. Tomar a lo largo del día.
Remedio con vellosilla para la fiebre Verter sobre un litro de agua que esté hirviente 100 gr. de vellosilla y dejar en maceración hasta que el agua se enfría. Luego endulzar con miel, y tomar 3 ó 4 tazas al día de esta tisana.
Remedio con vellosilla para la disentería: Hervir 40 g de vellosilla en 2 litros de agua para reducir a 1 litro Tapar y dejar refrescar por 1 hora. Filtrar y distribuir en 8 partes a tomar en 4 días, a razón de 2 veces al día de 16 a 20 días.
Prevención
Evitar su consumo si se sufre de presión arterial baja o hipotensión.
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