Cimicifuga racemosa: Beneficios y contraindicaciones

Quieres conocer sobre la cimicifuga racemosa beneficios y contraindicaciones porque has escuchado sus propiedades curativas especialmente para la menopausia? Aquí te lo explicamos, pero antes veamos más sobre su aspecto botánico.

La cimicifuga racemosa es originaria de los Estados Unidos y Canadá y se encuentra particularmente en el norte de Oregon, el estado de Washington y Ontario. Ahora se cultiva en muchos países mediterráneos europeos debido a la demanda comercial.

Es una planta perenne de la familia Ranunculaceae (ranúnculo).

Tiene hojas compuestas radicales con márgenes muy dentados y en verano produce un racimo compuesto de flores blancas estaminadas. Crece hasta una altura de 2 metros y se encuentra particularmente en bosques con sombra.

Partes de la planta utilizadas: el rizoma. Los rizomas se cosechan en otoño de plantas que tienen al menos dos años de edad, pero preferiblemente de mayor edad.

La hierba tiene un sabor amargo y fuerte y un olor ligeramente desagradable y generalmente se toma como un extracto estandarizado en forma de tabletas, aunque también está disponible como raíz seca y tintura.

Beneficios de la cimicifuga racemosa

Ingrediente activo y sustancias: los principales componentes de la cimicifuga racemosa son cimicifugina, glucósidos triterpénicos, isoflavonas, taninos, ácido salicílico, alcaloides (solo trazas), ácidos grasos (ácido ferúlico, ácido iso-ferúlico, mucílago, resinas, azúcares y almidón.

Además, se han identificado ocho nuevos glucósidos triterpénicos, llamados cimiracemosidos A-H.

El ácido ferúlico y el ácido iso-ferúlico son las dos sustancias que se cree que son responsables de la acción antiinflamatoria de la hierba.

Uso tradicional de la cimicifuga racemosa en América del Norte

En América del Norte, los nativos americanos y los primeros colonos europeos usaron la raíz (rizoma) de la cimicifuga racemosa como remedio para la menstruación irregular, para ayudar en el parto y para las mordeduras de serpientes de cascabel.

Otros usos tradicionales de la hierba incluyen el tratamiento de la malaria, el reumatismo, el dolor de espalda, la función renal anormal, la tos, el dolor de garganta y la fiebre. También se usó como un sedante suave.

Al igual que otras plantas medicinales importantes nativas de América del Norte, como la equinácea (Echinacea purpurea) y la palma enana americana (Serenoa repens), la cimicifuga racemosa se introdujo temprano en Europa.

La hierba se importó a Alemania a fines del siglo XIX, donde se usó principalmente en forma homeopática hasta 1930 para tratar trastornos ginecológicos.

Un remedio útil para la menopausia

El uso moderno de la hierba es más común para los síntomas de la menopausia, pero también para el síndrome premenstrual (PMS) y los períodos irregulares.

A medida que las mujeres alcanzan la menopausia, las señales entre los ovarios y la glándula pituitaria comienzan a disminuir, lo que a su vez reduce la producción de estrógenos y aumenta la secreción de la hormona luteinizante (LH). Se cree que los sofocos y otros síntomas agudos de la menopausia están relacionados con estos cambios.

Los primeros estudios realizados en ratas sugirieron un efecto hormonal de la cimicifuga racemosa. Uno de estos estudios encontró que los componentes de la cimicifuga racemosa se conectaban a los receptores de estrógenos en el útero.

Otro estudio encontró que la hierba causó una disminución en la concentración de LH en la sangre. La conclusión en ese momento era que la cimicifuga racemosa tenía un leve efecto de estrógeno y también reducía la cantidad de LH, que se cree que contribuyen a reducir los sofocos en las mujeres menopáusicas.

Sin embargo, en los últimos años, los estudios en animales y humanos indican que estos primeros hallazgos del efecto del estrógeno de la cimicifuga racemosa no son necesariamente precisos.

La conclusión fue, por lo tanto, a pesar de los hallazgos anteriores de que la cimicifuga racemosa no contiene fitoestrógenos, y que las mujeres experimentan síntomas de menopausia no deben considerarlo como un reemplazo de estrógenos.

Esta planta sigue siendo, a pesar de que probablemente no tenga efectos hormonales, considerado como una de las mejores opciones naturales para el alivio de los sofocos durante la menopausia y no causa efectos secundarios graves y riesgos potenciales para la salud (por ejemplo, un mayor riesgo de cáncer) como estrógeno.

Una descripción general de ocho ensayos clínicos alemanes sobre la efectividad de la cimicifuga racemosa como tratamiento para los síntomas de la menopausia y que se publicó en el Journal of Women’s Health, concluyó que la hierba es segura y efectiva, y puede ser adecuada como alternativa al reemplazo de estrógenos. terapia para mujeres que no desean usar sustitutos de estrógenos o donde el uso de dichos sustitutos puede ser dañino.

Algunas investigaciones han sugerido que la cimicifuga racemosa en combinación con la hierba de San Juan (Hypericum perforatum) es útil tanto para los sofocos como para los cambios de humor causados por la menopausia.

Otros usos de la cimicifuga racemosa

La cimicifuga racemosa se ha utilizado como tratamiento para la osteoporosis y se considera útil para algunos trastornos reumáticos, como la artritis. El ñame silvestre (Dioscorea villosa) a menudo se usa en combinación con la cimicifuga racemosa en ese sentido.

Se ha demostrado que las resinas presentes en la hierba expanden los vasos sanguíneos periféricos y, junto con su efecto calmante, pueden ser útiles como remedio para la presión arterial alta, reduciendo dolores de cabeza y acúfenos.

Tiene propiedades antiespasmódicas y relajantes musculares y se ha utilizado como alivio y tratamiento para la tos, el asma y la tos ferina.

La investigación ha demostrado que los salicilatos en la hierba actúan como un antiinflamatorio, lo que podría explicar su uso tradicional entre los nativos norteamericanos para el dolor nervioso y muscular.

A menudo se encuentra en combinación con otras hierbas que se consideran beneficiosas para la salud de las mujeres, p. ciclo menstrual y menopausia.

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Dosificación y administración

Tradicionalmente, la cimicifuga racemosa se ha utilizado como té donde se agrega 1 cucharadita (5 g) de la raíz seca a una taza de agua caliente. Alguna literatura recomienda tres tazas diarias. Cimicifuga racemosa beneficios y contraindicaciones

No se cree que la hierba sea particularmente efectiva cuando se usa en forma de té y se usa preferiblemente hoy como extractos líquidos estandarizados, tabletas o cápsulas.

Al usar productos comerciales, se deben seguir las instrucciones del fabricante.

Contraindicaciones y efectos secundarios de la cimicifuga racemosa

Los efectos secundarios de la cimicifuga racemosa son generalmente leves y raros. Incluyen malestares estomacales y náuseas. Otros efectos secundarios que se han observado son presión arterial baja, dolor de cabeza, mareos y reacciones alérgicas.

Algunos productos de la cimicifuga racemosa se han asociado con afecciones hepáticas graves, pero esto no se ha confirmado y probablemente se deba a productos de baja calidad. Cimicifuga racemosa beneficios y contraindicaciones

No hay interacciones conocidas entre esta hierba y la medicina convencional, aunque se sugiere no tomarla con medicamentos para la presión arterial alta. Las mujeres embarazadas y en periodo de lactancia no deben tomar esta hierba.